De Satie se podrá decir miles de cosas (que fue un rebelde contra el carácter plúmbeo y la complejidad de la música de su tiempo; un innovador en el uso de ciertos recursos armónicos; que realizó innovaciones haciendo énfasis en la bitonalidad, politonalidad y el jazz)...
Como se dicen otras tantas de demás artistas. Pero el sentido de una obra de arte no se forma en los comentarios que se forman a su alrededor, está en el vínculo insoluble que se logra formar entre ella y su receptor. Un vínculo vital que se traslada incesantemente de un extremo a otro, reuniendo, así, siquiera por un breve instante, a todos en un solo fenómeno.
Disfruten de su música...
No hay comentarios:
Publicar un comentario